viernes, abril 22, 2005

Mi hermano

Primero te amé
después te odié.
La vida nos separó
luego volvió a unirnos.
Para mi eres punto de partida
ejemplo, una guía.
Tus consejos son locos
pero guardan sabiduría.
Eres mi más severo juez,
también un gran maestro.
Por ti cambió mi mundo;
me bajaste de la nube
para instalarme en la tierra
Confieso que sólo tú puedes
herirme de verdad, porque
después de media vida
conoces todo de mí
sin que yo te lo diga.
Ahora eres el hermano
que nunca tuve.

1 comentario:

Anónimo dijo...

QUÈEEEEEEEEEEEEEEEEEEE?
PERMÌTEME NO ENTENDERTE...NO ENTENDERTE Y NO ENTENDERTE..